Y la luz golpeo tan fuertemente mis ojos
Que la explosión que vino después pareció solo un susurro,
Relámpago y trueno en uno solo sentido,
Aromas perdidos de la potencia divina,
Compilado en un día la sensación suprema
De ver en el hombre lo que es obra de dios.
Tan rápido el viaje en el aire,
Tan fugaz su visión a lo lejos,
Perdurando el secreto en el interior
De un recuerdo absoluto del corazón.
Momento y tiempo en sincronizado
Llorando el luto de algún desdichado.
Pretendiendo entender la razón de la acción,
Buscando saciar en la mente vivaz
Los pasos cortantes de mi caminar.
Volviendo la vista al retroceso
Esperando enseguida una vez más
Que el propio destello me fuese alcanzar.
Atrasado el sonido que viajo enfurecido
Porque jamás jamás a la luz le ganara
Ni con una ventaja de eternidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario